Los discursos ecologistas y los discursos conformistas se sitúan como los dos extremos. Pareciera que lo único que se discute es el grado de contaminación de los recursos, sin hacer hincapié en otras variables y sin aceptar términos medios.
Este artículo pretende ser ese término medio. Se abordarán distintos modos de producción de una manera racional y objetiva.
Ventajas: Es muy barata y práctica. También tienen un mecanismo muy sencillo.
Desventajas: Su elevado impacto ambiental. Sus emisiones de CO2 contribuyen gravemente al efecto invernadero y afectan también los microclimas locales. Por otro lado, si se tiene en cuenta la energía utilizada y la energía producida tienen un bajo rendimiento (30%).
Sin embargo, existen también centrales de ciclo combinado que utilizan los gases emitidos para mover otras turbinas. De ese modo aumenta el rendimiento (55%) y la contaminación que genera es menor.
Otro dato no menor es que la dependencia del combustible fósil limita este tipo de generación energética la cantidad existente en el país o la importación de los mismos y, por supuesto, a los precios internacionales.
Ventajas: Su costo de mantenimiento y operación es bajo. Su producción suele ser elevada y las represas tienen muchos años de vida útil. Por otro lado, no es un tipo de producción contaminante, ya que no libera CO2 como lo hace el combustible fósil.
Desventajas: Su costo de instalación es elevado y su impacto ambiental es muy grande, ya que afecta la corriente de los ríos y puede generar inundaciones, que afectan la vida vegetal, animal y humana de las zonas aledañas. Por otro lado depende de tener buenos cauces y que no haya sequías.
Ventajas: Es un tipo de energía limpia (no contaminante) y muy barata, ya que no requiere combustibles. Utiliza una fuente inagotable.
Desventajas: Su coste inicial es muy alto y la capacidad de producción depende de la estación del año, el clima y el nivel de radiación de la zona, sin olvidar el pequeño inconveniente del almacenamiento durante la noche. Debido a esto necesita de terrenos muy amplios para instalarse.
Existe también otro tipo de energía que utiliza la radiación solar llamada termosolar o solar térmica, que consiste en utilizar el calor emanado por el sol para calentar agua, de forma similar a lo que hacen las centrales térmicas. Las ventajas y desventajas de la energía solar aplican también a este punto.
Ventajas: No es contaminante y tiene costos de operación y mantenimiento muy bajos.
Desventajas: El viento no se puede producir, por lo que no deja de haber riesgos que dependen del tiempo y del clima de la zona. Necesita de grandes extensiones y de costos iniciales muy elevados. El transporte de la electricidad producida es muy costoso. Producen contaminación visual y sonora, afectando el medio ambiente.
Ventajas: No es tan contaminante como la energía fósil. Su costo operacional es bajo. Las centrales no ocupan mucho espacio.
Desventajas: Puede contaminar las aguas subterráneas y generar sismos, además de emitir gases contaminantes como sulfuro de hidrógeno. No se puede instalar en todos lados, lo cual genera diferencias importantes en los costos iniciales. El transporte es muy problemático.
Ventajas: No contamina. Es prácticamente ilimitada. Como el recurso que utiliza es el mar es constante e inacabable. Sus costos de mantenimiento y operación no son muy altos.
Desventajas: Es muy costosa. Aún se encuentra en fase experimental (por lo que aún no es muy eficaz). Depende de las condiciones geográficas del país. Puede llegar a afectar el ecosistema marítimo.
Ventajas: Su costo operacional y de mantenimiento es barato si se compara con la cantidad producida. No necesita de grandes espacios. No emite gases de invernadero ni contribuye al calentamiento global. Tienen la capacidad de funcionar de manera autónoma durante mucho tiempo.
Desventajas: El enorme rechazo social y político que genera. Los costos iniciales son muy altos. Si bien por lo general son seguras, la menor falla de seguridad puede derivar en catástrofes ambientales de magnitud. Los residuos que deja son muy peligrosos y hasta el día de hoy no se sabe a ciencia cierta que hacer con ellos, por lo que se los mantiene almacenados.
Conclusión
Todos los tipos de producción de energía, tanto los convencionales (térmica, hidroeléctrica, nuclear) como los "alternativos" (solar, eólica) o los experimentales (mareomotriz, hidrógeno, geotérmica) tienen ventajas y desventajas. Podría decirse que aquellas que presentan menores costos y pueden proveer a amplias áreas son las más contaminantes, en tanto que las que no contaminan no tienen gran alcance y suelen ser caras. Salir a despotricar contra las convencionales e insistir en la necesidad de las alternativas (o viceversa) no tiene sentido si no se tienen en cuenta todos los pro y los contra.
La solución consiste en tener políticas energéticas. Ésto es no quedarse en un tipo solo de energía. Trabajar para que las convencionales contaminen lo menos posible y aumenten su eficiencia. En tanto invertir en la construcción de fuentes de energías alternativas, sabiendo que éstas solo pueden abarcar poblaciones reducidas. Solo de este modo los costos y beneficios se equilibrarían lo más posible.
No se puede dejar de lado tampoco el impulso a la investigación científica en el área energética para justamente lograr los objetivos antes mencionados. Y porqué no, apoyar también la investigación de aquellas energías en fase experimental.
Todo esto implica cambios en el presupuesto nacional y la puesta en práctica de políticas a corto, mediano y largo plazo. Estas políticas deben incluir también la construcción de redes de transporte y distribución.
No hay comentarios:
Publicar un comentario