jueves, 28 de mayo de 2015

El mito de la sexualidad infantil


Uno de los pilares de la teoría freudiana es el desarrollo psicosexual del individuo:

En la psicología freudiana, el desarrollo psicosexual es un elemento central de la teoría psicoanalítica de las pulsiones sexuales que sostiene que el ser humano, desde el nacimiento, posee una libido instintiva (energía sexual) que se desarrolla en cinco etapas. En esta teoría, desarrollada hacia finales del siglo XIX y comienzos del siglo XX, Freud propone un concepto ampliado de la sexualidad humana, idea revolucionaria en su época, que postula la existencia de una sexualidad infantil, cuyo desarrollo está organizado en fases. Cada una de estas fases está caracterizada por una zona erógena que es la fuente de la pulsión libidinal durante esa etapa. Estas fases son (en orden de su aparición): oral, anal, fálica, de latencia y genital. Freud creía que si durante cualquiera de estas fases el niño experimentaba frustración sexual en relación a cualquier estado de desarrollo psicosexual, el/ella podía experimentar ansiedad que podría persistir en la edad adulta como una neurosis, un trastorno mental funcional. (Wikipedia)

Hay que hacer varias anotaciones sobre estas ideas. En el pasado en este blog ya se ha hablado sobre el psicoanálisis (ver aquí o aquí). En este caso vamos a profundizar en este tema que tanta polémica generó en su momento y que hoy es considerado una especia de verdad irrefutable.

Debe señalarse en primer lugar que la teoría psicoanalítica peca de simplista, ya que es monocausal. Freud explica todos los trastornos del adulto en virtud de sus traumas sexuales cuando niño. Se puede afirmar que Freud tenía una verdadera obsesión con el sexo.

En segundo lugar, las observaciones experimentales que confirman este desarrollo psicosexual se basan en experiencias de psicoanalistas con pacientes niños. Pero los testimonios recogidos de esos niños (el caso más famoso es el del Pequeño Hans) fueron recuerdos forzados o interpretados por los analistas. En otras palabras, eran los "doctores" quienes amoldaban lo que decían los niños y quienes les decían cuáles eran sus recuerdos reales.

En tercer lugar, desde el punto de vista neurológico la teoría freudiana hace agua por todos lados. La idea psicoanalítica dice que las personas desde su nacimiento tienen impulsos sexuales. Pero resulta que no es así. El psicoanálisis llama "pulsión sexual" a cualquier sensación placentera.
Lo cierto es que el principal órgano sexual del ser humano es el cerebro y las áreas relacionadas con la sexualidad (hipotálamo e hipófisis) no se encuentran plenamente desarrolladas hasta después de los cuatro años. También a partir de esa edad aparecen las diferenciaciones sexuales (dimorfismo), claves en el desarrollo posterior de la orientación e identidad sexual durante la pubertad. ¿Cómo puede hablarse entonces de "sexualidad infantil" antes de esa edad? Mejor dicho ¿a qué se refiere Freud con el término "sexual"?
Dentro de este enjambre de ambigüedades aparece el complejo de Edipo que dice que los niños de entre tres y seis años quieren matar a su padre para tener relaciones sexuales con su madre. No tiene sentido refutar algo semejante: A esa edad un niño no tiene ese tipo de ideas.
Por otro lado, se sabe de bebés masturbándose o incluso de fetos. Eso contradice totalmente la teoría freudiana que dice que esas actitudes no ocurren sino hasta la etapa genital (desde los seis años).

Conclusiones:
_No existe una "sexualidad infantil" y no se la puede confundir con el placer simple y llano
_A partir de los 4 años comienza el desarrollo sexual del individuo, no desde el nacimiento
_A esa edad no se tiene la suficiente madurez sexual como para sentir el deseo de tener relaciones (complejo de Edipo)
_Aún si este concepto existiera, no se puede aplicar para explicar todos los problemas psicológicos de las personas

Ver también
Refutación en el blog Sobre -o contra- el psicoanálisis.

lunes, 25 de mayo de 2015

Aspartamo, transgénicos, bisfenol A y gluten: la industria hace su agosto con la mala ciencia


[Extracto del blog El nutricionista de la general]

De entrada estos cuatro elementos tienen en común que todos han sido objeto de al menos un post en este blog (ver enlace 1, enlace 2, enlace 3 y enlace 4 a modo de ejemplo, aunque hay más) y que han sido tratados porque son temas de candente actualidad… Pero más allá de esta circunstancial anécdota tienen bastante más en común.

El caso es que, como veremos más adelante, la mala ciencia, la pseudociencia, o la falta de evidencia al respecto de un determinado tema son utilizadas en no pocas ocasiones como motor de cambio o de “mejora” por parte de la industria alimentaria, la cual modifica su línea empresarial utilizando como “primer motor causal” las modas populares o las tendencias a pie de calle. Para los fines que en este caso se persiguen poco importa lo que la ciencia diga, lo importante es lo que piensen los consumidores que a fin de cuentas comprarán y consumirán (o dejarán de hacerlo) en base a sus creencias… ya sean atinadas o no. Tenemos muchas muestras de ello; pero en este post pretendo aportar solo el ejemplo de cuatro casos que, tal y como he puesto de manifiesto, son especialmente sangrantes en el mundo de la conspiración alimentaria: se trata del aspartamo, de los transgénicos, del bisfenol A y del gluten. Vamos allá.

martes, 19 de mayo de 2015

Dios no existe: Sus paradojas

Términos
Omnipotencia: Poder hacer todo
Omnisciencia: Saberlo todo
Omnipresencia: Estar en todos lados
Omnibenevolencia: Estar siempre preocupado por el bien
Misericordia: Piedad, compasión
Autosuficiencia: Posee dentro de sí todo lo necesario para existir


* Si Dios es omnipotente ¿puede dejar de ser Dios? ¿puede dejar de ser omnipotente, omnisciente, omnipresente o eterno?

* Una vieja paradoja que no deja de tener vigencia: ¿puede Dios crear una piedra tan grande que después no pueda moverla?

* La clásica paradoja de Epicuro: Existe el mal en el mundo ¿Dios puede evitarlo? Si no puede, no es omnipotente. Si puede pero no lo hace, es maligno y no es omnibenevolente.

* Si Dios es omnibenevolente y a la vez omnipresente ¿por qué hay lugares donde existe el mal?

* La Biblia establece ciertas limitaciones al carácter de Dios, ya que dice que no miente y no se arrepiente. Entonces no puede hacerlo todo.

* Dios ¿podría crear triángulos de cuatro puntas o solteros casados?

* ¿Dios sabe todas las cosas que van a pasar? ¿Puede intervenir para que pasen otras cosas? Si no puede, no es omnipotente. Si puede, no es omnisciente, puesto que no sabe realmente lo que va a pasar.

* Dios es misericordioso porque le da a todo el mundo la oportunidad de salvarse. Pero al mismo tiempo es omnisciente, porque tiene planificado quién se salvará y quién no. Entonces no da ninguna chance. Pero si da alguna chance entonces no es omnisciente.

* ¿Por qué un Dios misericordioso castiga por toda la eternidad?

* Dios es justo y a la vez misericordioso (tiene piedad). Ambas cosas se contraponen.

* Dios es perfecto, creó al hombre a su imagen y semejanza. Pero el hombre es imperfecto. La respuesta usual es que el hombre era perfecto y después cayó en pecado, pero entonces si cayó no era perfecto. Dios creó un ser imperfecto a su imagen o semejanza.

* Si Dios es autosuficiente ¿cómo puede desarrollar el sentimiento de amor?

jueves, 14 de mayo de 2015

Los "argumentos" de los negadores del Holocausto


Dentro del amplio ámbito de las pseudociencias existen aquellas que por sus principios o aplicación práctica (racialismo, discursos anti-medicina) resultan peligrosas. El negacionismo del Holocausto es una de ellas.

Es una corriente de pensamiento que, enmascarada con un supuesto barniz "historiográfico", pretende borrar de la Historia un hecho bien documentado. Y el propósito de este acto es promover el nazismo de forma encubierta.

Si bien responderles a estos personajes sería rebajarnos a su nivel y sería darle entidad una corriente que no tiene cabida en ningún ámbito serio, es necesario aclarar algunas cosas para que los lectores incautos no caigan.

miércoles, 13 de mayo de 2015

Sobre los suplementos vitamínicos


El consumo de suplementos multivitamínicos prolonga y mejora la calidad de vida
FALSO

Los estudios realizados prueban que el consumo de suplementos multivitamínicos por parte de personas sanas no evita enfermedades ni trae beneficios significativos.

El consumo periódico de suplementos multivitamínicos por parte de personas sanas es frecuente en la actualidad. Aunque en la Argentina no contamos con información confiable acerca del uso de estos suplementos, estudios realizados en otros países sugieren que hasta el 50% de la población podría estar consumiendo este tipo de suplementos y los subgrupos más propensos serían las mujeres, los ancianos, las personas con mayor nivel de instrucción y aquellos que realizan ejercicio físico.

Las principales razones esgrimidas por los consumidores de estos suplementos para justificar su conducta incluyen: preservar la salud (no enfermarse), combatir el cansancio y mejorar el apetito. Muchas de estas justificaciones son alimentadas por el marketing de la industria farmacéutica en medios de comunicación masiva (por ejemplo, esta nota).

Se publicaron múltiples estudios que evaluaron el efecto de los multivitamínicos sobre la salud de personas sanas. Los resultados informan que el consumo de estos suplementos no prolonga ni mejora la calidad de vida, no evita la enfermedad cardiovascular, no disminuye significativamente el riesgo de cáncer en general ni el riesgo de cáncer de mama, próstata, pulmón o colon en particular, no mejora significativamente la memoria a largo plazo (podría mejorar sutilmente la memoria a corto plazo), no disminuye el riesgo de cataratas ni enfermedad de la mácula del ojo, no disminuye el riesgo de infecciones y podría aumentar sutilmente el riesgo de fractura de cadera en mujeres ancianas (ver documento técnico).

La confianza sobre la mencionada ausencia de beneficios es alta para la mayoría de las afirmaciones ya que los estudios fueron, en su mayoría, adecuadamente realizados; para algunos casos, como los efectos sobre la calidad de vida, la memoria, las infecciones o las fracturas de cadera, las pruebas no son contundentes y dejan abierta la posibilidad de que lo observado no sea real.

Como conclusión, puede afirmarse que el consumo de complejos multivitamínicos por parte de personas sanas que se alimentan adecuadamente no ha probado asociarse con beneficios significativos sobre la calidad de vida ni evitar enfermedades. Los costos económicos de estos suplementos son, por lo general, de moderados a altos en comparación con otros fármacos de consumo crónico. En este contexto, se considera que la mayoría de las personas bien informadas optaría por no consumir estos suplementos y solo aquellos que antepongan la posibilidad de obtener algún beneficio no probado por sobre la chance de efectos adversos y los costos económicos, sí lo elegirían.

Acá puede verse el documento técnico con los cuadros comparativos. Este chequeo fue realizado de acuerdo a la metodología de Chequeado Ciencia.

Fuente: Chequeado.com

Ver también
La evidencia de los suplementos vitamínicos (nota del Círculo Escéptico Argentino)

lunes, 11 de mayo de 2015

Dios no existe (parte 2)

1.2 Consideraciones finales sobre el teísmo

Hasta este momento había establecido que la creencia teísta era incomprobable, ilógica e irracional. A continuación voy a establecer que además de todo es falsa.

En primer lugar, existe la idea que el dios creador es además quien mantiene las cosas y que sigue interviniendo en la realidad este universo. Frente a esta idea hay que recordar que esas intervenciones son cada vez menos necesarias. Ésto es, lo que ocurre en la realidad es explicado por motivos científicos. En otras épocas las lluvias o el solo hecho del amanecer se explicaba por medio de un dios o de dioses. Actualmente sabemos que desde hace miles de año las explicaciones relacionadas con dioses pertenecen a épocas pre-filosóficas (ni siquiera pre-científicas) y que las causas que expliquen los sucesos que ocurren en el universo deben entenderse dentro de leyes científicas y no por designios de tal o cual dios. En otras palabras, las intervenciones de dios en la realidad son explicaciones tentativas de hechos que a lo largo de los siglos obtuvieron explicaciones comprobables y empíricas.

En segundo lugar, las ideas de las distintas religiones sobre Dios son en realidad hipérboles creadas a partir de la imagen del ser humano. Es decir, Dios o los dioses aparecen como humanos mágicos o maravillosos cuyo principal meta es interactuar con los humanos y cuya función está relacionada con los humanos. En resumen, las religiones no nos hablan en realidad de seres poderosos por fuera de este universo, sino que en realidad nos hablan de seres poderosos dentro de este universo. Un intento por humanizar y acercar aquellas fuerzas que resultaban tan indomables. Y eso sin contar cuando aquellos dioses en la antigüedad parecían reyes o guerreros.

Por estas dos cosas más las anteriores puede descartarse que existan los dioses que intervienen en el universo y la vida humana.


2. Deísmo: Doctrina que reconoce un dios como autor de la naturaleza, pero sin admitir revelación ni culto externo.

Esta filosofía es conocida por haber sido propuesta por algunos filósofos griegos y por haber estado presente en la Ilustración. Muchos Padres Fundadores de EEUU adherían a la misma y uno de ellos, Thomas Paine, es considerado uno de los principales apologistas del deísmo en la historia.

Básicamente esta idea dice que existe un dios que creó el  y sus leyes pero que no interviene en él mismo. Para acceder a tal dios debe trabajarse desde la razón, y que ésta sería una manifestación de ese dios. Por otro lado rechaza totalmente las religiones y las revelaciones sagradas.

Aunque debe admitirse que esta filosofía es más coherente desde la razón y la lógica que el teísmo liso y llano, no hay que dejar de admitir que sigue siendo irracional e ilógica. Si existe un dios que creó todo pero que no interfiere en su creación ¿cómo saber que efectivamente ese dios existe? No hay realmente manera de conocerlo y postular su existencia es un asunto de fe.

El principal argumento del deísmo es decir que tiene que haber algo o alguien detrás de todo esto que haya permitido que todo ocurra y que todo esto se mantenga. Parte de ese argumento es tomado por el teísmo. Pero también resulta bastante débil.
1_¿Por qué ese algo que creó y mantiene todo tiene que ser un dios personal?
2_¿Quién creó a ese algo o alguien? ¿de dónde salió?
3_Como se dijo anteriormente, aquellos huecos de nuestro entendimiento que eran llenados por dios son cada vez menos. Pretender haber encontrado "ahora si" los huecos definitivos es, cuando menos, apresurado.
4_No es lógico ni racional afirmar la existencia de un dios por detrás de todo. Decir que se puede llegar al mismo "por la razón" es falso.

En resumen: El deísmo es una propuesta que cae en el falso argumento del dios de los huecos. El dios que presenta resulta contingente (innecesario) y completamente incomprobable. Y cae en una petición de falso principio al afirmar, sin más, que ese motor o sostén del universo es un dios personal. No obstante debe señalarse que al referirse a la realidad trascendental que está por fuera de este universo existe cierto margen para su existencia (siempre y cuando no se refiera una simple deificación de alguna voluntad humana). Por eso mismo decía que era más coherente que el teísmo.


3. Panteísmo: Sistema de quienes creen que la totalidad del universo es el único Dios.

Esta idea, común a varias religiones orientales, enseña que la naturaleza en su totalidad compone a Dios. Ésto es, las leyes naturales y toda la creación son manifestaciones de ese Dios. No hay nada trascendente, ya que todo es Dios

Con respecto a esta postura hay que acotar que tiene dos posibles interpretaciones. Si se la entiende como solo decir que Dios = Naturaleza sin ningún otro tipo de atributo ni aspecto sobrenatural debe decirse que no está muy lejos del ateísmo. Incluso podría afirmarse que es sólo un ateísmo edulcorado. Es simplemente sentir atracción y admiración por la naturaleza.
En cambio, si se afirma que detrás del panteísmo existe una suerte de voluntad cósmica que hace el bien o el mal a las personas entonces se cae en la irracionalidad y no se encuentra mucha diferencia con un teísmo liso y llano, en donde se reemplaza al dios personal por un dios impersonal. Hay entonces algunas cosas que acotar.

En primer lugar, las mismas críticas que se le hacen a las religiones teístas se le pueden hacer a las religiones panteístas. No hay manera de saber si las revelaciones antiguas son verdaderas, no hay manera de saber cuál de esas revelaciones es la correcta y sus efectos en la vida de las personas no pueden ser observados.
Pero en segundo lugar nos topamos con una contradicción: Si dios es todo, entonces dios es impersonal. Y si dios es impersonal no puede tener entonces voluntad, ni conocimiento ni sentimientos. Entonces ¿de qué manera dios/naturaleza podría interferir en las vidas de las personas? Es totalmente contradictorio.
Por último, si este dios/naturaleza tiene voluntad ¿en qué momento empezó a tenerla? ¿quién se la dio? ¿de dónde surgió su capacidad de raciocinio?

En resumen: El panteísmo puede ser entendido como simple admiración por la naturaleza, sin diferenciarse mucho del ateísmo. Pero en cuanto toma ribetes religiosos e ideas trascendentales (contradiciendo incluso sus bases filosóficas) cae en la irracionalidad incomprobable.


Conclusiones
Sobre el teísmo (y las religiones): Completamente incomprobable y falso. Se puede afirmar que los dioses como tales no existen.
Sobre el deísmo: Completamente incomprobable. Pero al hablar de un dios que no interviene en el desarrollo de la realidad no puede ser descartado del todo, aunque si se debe señalar que no hay evidencias sustentables para considerarlo verdadero.
Sobre el panteísmo: Puede ser una simple admiración por el universo o puede ser entendido como una despersonalización de un dios que castiga y recompensa. En este segundo caso es incomprobable y se puede afirmar que esa voluntad no existe.

Para finalizar: Dios no existe y las realidades trascendentales por fuera de este universo y esta realidad son incomprobables y no intervienen para nada en nuestra existencia. El ateísmo es la opción más lógica y racional por rechazar la existencia de dioses personales que intervienen en la realidad. Con respecto a la creencia en motores o fuerzas por fuera del universo que permiten su subsistencia y que no intervienen en la realidad, es incomprobable desde todo punto de vista, por lo que se puede decir que en esos aspectos la opinión más lógica y racional es el agnosticismo pero con tendencia a no creer (por considerarlas inventos humanos).

Dios no existe (parte 1)

Cuando se quiere hablar de la existencia o inexistencia de Dios es necesario primero delimitar a que nos referimos cuando hablamos de Dios.

Hay que destacar que existen tantas versiones de dios como religiones, filosofías e interpretaciones particulares de cada una de éstas existen. Podría decirse que no existen dos dioses iguales.

A grandes rasgos se pueden diferenciar tres grandes posturas:
1_Teísmo
2_Deísmo
3_Panteísmo

De estas tres posturas las dos primeras creen en un dios personal, aunque con diferenciaciones, en tanto que la última descree de eso. En este artículo voy a tratar de demostrar porque desde el punto de vista racional y escéptico la existencia de un dios es altamente improbable y, dependiendo la postura filosófica a estudiar, completamente imposible.

De más está decir que este artículo es apenas un esbozo y que este es un tema más profundo que amerita más análisis. Sirva apenas como una introducción. Veamos entonces las posturas.

1_Teísmo: Creencia en un dios personal y providente, creador y conservador del mundo.

Puede decirse, en otros términos, que es teísta aquel que cree en un dios o varios que crearon el mundo, que lo dirigen actualmente y que interviene en su creación. Dios aparece aquí como alguien trascendental que está por fuera del Universo.

Un ejemplo claro de esta filosofía lo observamos en las grandes religiones monoteístas: Cristianismo, islamismo y judaísmo. Por supuesto que también existen otras variantes, como el politeísmo (varios dioses) o el henoteísmo (varios dioses pero sólo se le rinde culto a uno).

Quienes sostienen este punto de vista al aceptar que existe una realidad trascendental a este universo no pueden demostrar efectivamente que esa otra realidad exista. Se acepta por fe, es decir, por creencia irracional. Cosa bastante lógica si se tiene en cuenta que ese dios está supuestamente por afuera de nuestra realidad.

Pero al mismo tiempo se nos dice que ese dios mantiene e interviene en su creación. Por lo tanto deberíamos ver pruebas de ese mantenimiento y esas intervenciones. Y ahí es donde el teísmo hace agua porque no puede aportar ninguna evidencia.

Se puede utilizar como argumentos la creación del universo, su sostenimiento o ciertos hechos paranormales. Pero resulta que no son suficientes. Hoy en día contamos con explicaciones científicas perfectamente lógicas que explican ese tipo de cosas.

No hay que olvidarse de la famosa navaja de Occam (curiosamente el creador de este argumento fue un fraile del siglo XIV, Guillermo de Ockham). Este principio metodológico dice que "en igualdad de condiciones, la explicación más sencilla suele ser la correcta". Si se aplica a la demostración de la existencia de Dios resulta un argumento en su contra.

Teniendo este actual sistema de cosas, que va desde las pequeñas partículas subatómicas hasta las gigantescas galaxias, explicaciones por leyes racionales observadas experimentalmente o perfectamente concordantes con respecto a nuestros conocimientos, caer en la explicación de que fue un dios o algo sobrenatural es caer en una falacia. Es desplazar el problema hacia la nada. Y digo que es hacia la nada porque no hay maneras correctas de conocer la voluntad o los designios de ese ser trascendental.

En resumen: El teísmo no se sostiene por la lógica ni por la razón. Al pretender afirmar que ese dios no sólo creó el universo sino que también interviene en el mismo en la actualidad caen en la infalsabilidad. Sencillamente no pueden demostrar que esa creación o esas intervenciones existan o hayan existido. Es una creencia ilógica e irracional.


1.1_Los dioses religiosos

Una pequeña disgresión que viene al caso: El dios de las religiones al cuál hay que rendirle culto. Sea acaso el Yahvé judío, el Dios trino cristiano o el Alá musulmán.

La idea sería la siguiente: No sólo Dios es creador y sostén del universo. También es quien nos entregó designios para vivir y a quien hay que rendirle culto, bajo amenaza de castigos o maldiciones.

Si el punto antes mencionado era irracional e ilógico este lo es aún más. No sólo pretenden que Dios intervenga en el universo, sino que además se haya comunicado en determinado momento con determinadas personas.

Esa idea, de que Dios se haya mostrado de cierta forma a cierta gente en cierta época, cae en errores groseros:
1_Sencillamente incomprobable. No hay ninguna prueba de que esas revelaciones hayan ocurrido como los libros sagrados dicen que pasaron o que hayan pasado siquiera.
2_Un motivo tan sencillo como preguntarse ¿por qué debo creer en una religión y no en otra?
3_Si Dios manifiesta su existencia a todo el mundo través de la creación ¿por qué no manifiesta también sus mandamientos a todos?
4_Dicen las religiones que Dios nos crea con determinado fin. Surge entonces la pregunta ¿por qué creo tantas cosas inútiles alrededor? Galaxias, cometas, asteroides, planetas, estrellas y tantas otras cosas dentro de un universo muy grande, dentro del cual no somos el centro ni por asomo (ni siquiera somos el centro de nuestro sistema planetario). Resulta mucho más lógico apelar a las leyes de la ciencia que explican como nuestro planeta es uno más de tantos y nuestra existencia es fruto de esas mismas leyes

Un argumento adicional es que las distintas religiones cambiaron a lo largo de los siglos, desde el animismo primitivo al moderno monoteísmo, pasando por los politeísmos, según el pueblo y la época en donde esa religión se desarrolló. Por lo tanto no sólo tenemos el problema de cuál dios actual es el verdadero, sino también cuál(es) dios(es) de todos los que existieron es verdadero. Si los dioses de la antigüedad son hoy descartados ¿por qué no lo serían en un futuro los dioses actuales?
Podrá argumentarse que se trata de un mismo dios que fue revelado a toda la humanidad, pero que ésta lo interpretó de diferentes maneras. Ocurre que no es así. En primer lugar, las diferencias entre religiones en muchos casos son insalvables. No hay manera de interpretar que se refieran a una misma cosa con varias versiones. Y en segundo lugar no hay manera de saber quién tuvo la revelación original.

Por último, las amenazas del castigo o de la maldición. No se puede observar una relación causal que establezca que quienes siguen a determinada religión sean más prósperos o saludables que quienes sigan a otra o no sigan a ninguno. Entonces se pueden descartar las consecuencias terrenales.
Y en cuanto a consecuencias espirituales en otro mundo u otra dimensión, de nuevo, son incomprobables. Y siempre existirá el riesgo de estar adorando al dios equivocado por lo que ese castigo sería inevitable. Es decir, si existe ese castigo es incomprobable y además es imposible saber si uno se escapa del mismo.

En resumen: La creencia en dioses religiosos a los que hay que rendirles culto es otro acto ilógico e irracional. No existe el menor motivo para creer en este tipo de cosas

Continuará...

domingo, 10 de mayo de 2015

Monsanto: Ni ángel ni demonio


Recientemente el divulgador científico Eduardo Mulet sufrió un violento escrache en la Feria del Libro. ¿La razón? Su defensa a Monsanto. O al menos eso interpretaron los agresores.

Desde hace años existe una furibunda campaña organizada por sectores pseudoecologistas en contra de esta multinacional. Incluso existe el Día Mundial contra Monsanto. La principal acusación que se le hace es la de actuar como una trasnacional ambiciosa que quiere patentar todos los campos del mundo, que promociona los transgénicos y el uso del glifosato, que según los "ecologistas" es el peor pesticida que existe. Analicemos estas ideas.


Sobre los transgénicos ya hemos hablado en este blog. La idea de que los alimentos genéticamente modificados son perniciosos para la salud es falsa. La evidencia científica demuestra que muchos de esos alimentos son buenos para la salud y se debe seguir investigando al respecto. Por supuesto que también puede haber casos en donde resulten riesgosos, por eso es que se debe seguir trabajando. Rechazar "los transgénicos" como un todo es erróneo y anti-científico, al margen de señalar la falta de rigurosidad de aquellos estudios que pretenden demostrar que los vegetales de Monsanto generan cáncer o cosas similares.

La crítica puede provenir hacia los abusos con las leyes de patentes que hace Monsanto con respecto a los productores. En ese sentido estamos de acuerdo con que los descubrimientos científicos que mejoren las condiciones de vida no deben ser restringidos por motivos económicos. Pero eso no implica negarse al desarrollo científico o las investigaciones.


Sobre el glifosato (cuyo nombre comercial es Roundup), es mucho lo que se dice. Debe aclararse en primer lugar que la patente comercial de Monsanto venció en el 2000.

Con respecto al glifosato per sé lo cierto es que no hay evidencias científicas que sirvan para demostrar su elevada toxicidad. El mito dice que el glifosato es lo peor que existe, que genera cáncer, malformaciones y todos los males del mundo.

Realmente no hay estudios científicos que sirvan para demostrar esa afirmación. Recientemente la EPA (Asociación de Protección Ambiental de EEUU) concluyó tras varias investigaciones que la asociación entre glifosato y cáncer es muy baja. Un estudio de la Comisión Europea demostró que no existen efectos adversos grandes en su uso. Un famoso trabajo del año 2012 pretendía demostrar que el uso de Roundup era dañino para los embriones humanos, Pero un año después la revista que lo publicó decidió quitarlo por la falta de rigurosidad que ese estudio tenía.

¿El glifosato es tóxico? Seguramente, como todo pesticida. Pero en comparación con otros pesticidas es mucho menos tóxico y tiene un nivel de toxicidad muy bajo.

Por tanto, si los transgénicos no son malos para la salud y si el glifosato no es el terrible demonio que nos quieren hacer mostrar ¿Monsanto es bueno? No, para nada. Es una compañía trasnacional, y como tal incurre en todo tipo de acciones inmorales que le generan ganancias. Pero eso no es exclusivo de Monsanto, sino de la lógica empresarial.

Criticar a esta empresa por sus acciones es correcto. Pero usarla como mascarón de proa para atacar investigaciones que podrían mejorar sustancialmente la calidad de vida o la producción agrícola es inmoral.


Ver también

martes, 5 de mayo de 2015

Marxismo: Socialismo (pseudo)científico


Karl Marx fue sin duda uno de los grandes filósofos de la Historia y aportó mucho para la concepción de las Ciencias Sociales. Pero su teoría quedó obsoleta. Y el mote de "científico" le queda enorme.

Vayamos por partes. Nadie niega el rol importante que tuvo Marx en la Historia de las Ciencias Sociales ya que fue de los primeros en observar que detrás de la realidad había "algo más". Karl Popper, quien fue un acérrimo crítico del marxismo por considerarlo infalsable, tenía un buen concepto de Marx al considerarlo un científico social que realmente quiso cambiar la realidad. Por su lado, Mario Bunge dice que Marx "era un científico social serio, un pensador serio, pero muchas veces confundió ciencia con ideología".

Sin embargo no por eso se va a aceptar su teoría, la cual ha sido modificada a lo largo de las décadas, pero conserva ciertas premisas esenciales.

Voy a nombrar tres aspectos que, en mi opinión, alcanzan para catalogar al socialismo científico de pseudociencia.

En primer lugar, esta teoría es una muestra de historicismo. Trata a la Historia como un devenir con un fin determinado.

Es cierto que las Ciencias Sociales deben también ser predictivas, al igual que las Naturales. Pero una cosa es ser predictiva en el sentido de afirmar que si ocurre tal cosa en consecuencia ocurrirá tal otra, y otra cosa muy diferente es afirmar que toda la humanidad va hacia un fin determinado. Eso es lo que hace el marxismo al establecer que la Historia se encamina hacia el fin de los antagonismos de clase y la imposición del comunismo.

Esta afirmación roza lo metafísico y no permite ser falsable, ya que, según esta tesis, todo lo que ocurre día a día confirma ese rumbo. En otras palabras, es una profecía.

En segundo lugar, el materialismo histórico peca en simplista y determinista. Le adjudica a las relaciones de producción ser la base material de la sociedad y determinar la estructura social y política (superestructura). Esta visión le da una importancia excesiva al factor económico y olvida otras variables, como los factores políticos, sociales o culturales, incluso cuestiones biológicas o geográficas (clima, epidemias, desastres naturales, etc.) que todo análisis sociológico, antropológico o histórico debe tener en cuenta. Esos factores en muchos casos inciden en el sistema económico, por lo que la relación es inversa.

Por otro lado, basta con ver someramente la Historia para darse cuenta que la lucha de clases (el enfrentamiento entre quienes poseen los medios de producción y quienes son explotados), que según los marxistas es el motor de la Historia, es apenas un fenómeno más dentro de los sucesos históricas. Ni siempre los grandes cambios se produjeron por esto ni siempre que hubo un conflicto de este tipo hubo grandes cambios. Y no fueron pocos los casos (como en las revoluciones nacionalistas) en donde no hubo conflicto, sino cooperación entre clases y se ocasionaron grandes cambios. Cabe aclarar, históricamente la cooperación tiene una importancia fundamental, tanto como los antagonismos, para que las sociedades exitan.

También hay que señalar que Marx hablaba que detrás de este tipo de enfrentamiento existían "leyes universales". Pero esas leyes brillan por su ausencia.

Y tercer lugar la economía marxista puede considerarse un modelo obsoleto. La plusvalía no deja de ser una abstracción que en la vida real no puede medirse porque no hay un valor objetivo de las cosas ni del tiempo de trabajo. La cantidad de tiempo que se necesita para fabricar un producto no es la única variable que determina su precio, existen factores externos que inciden en ellos (expectativas, especulación, inflación, deflación, etc.) y la idea de "salario de subsistencia" no es específica, ya que la cantidad de capital que necesita un trabajador para subsistir un día y volver al siguiente es subjetiva y no es igual hoy a la de mediados del siglo XIX, sin contar con las diferencias salariales que existen dentro de los mismas industrias. Por eso, en el mejor de los casos, el marxismo es anacrónico.

Por último, no puede dejarse de lado la importancia de la propia Historia. La evolución del capitalismo en estos dos siglos y las experiencias socialistas, lejos de confirmar la tesis marxista, la han refutado.

En resumen, el socialismo científico y sus principales ideas (materialismo histórico y plusvalía) pudieron tener una base más o menos empírica, pero al día de hoy sus premisas resultan anacrónicas y no científicas. Y por lo tanto cualquier modificación que busque hacerse, si se basa en esas premisas, incurre en los mismos errores.

lunes, 4 de mayo de 2015

Agrohomeopatía: Cuando las pseudociencias se tocan


"Las mafias farmacéuticas no dejan avanzar la homeopatía"
"Los transgénicos y los pesticidas son malos, malos, malos"

¿Qué pasa si mezclamos ambas ideas en una? El resultado es la agrohomeopatía.

¿En qué consiste esta aberración contra el pensamiento científico? Básicamente en aplicar los principios de la homeopatía a la agricultura para tratar las semillas. Consiste básicamente en:

• Se añade una gota de producto en un litro de agua, se agita fuerte durante un minuto y luego se riega o se usa en forma de aerosol.
• Mochila o mayor volumen añadir el litro que se preparó y completar con agua.
• Se pueden tratar semillas sumergiéndolas en esta solución durante 20 minutos.


La clásica "memoria del agua", uno de los principios básicos de la homeopatía que ya fue refutado y descartado por la comunidad científica.
En el link anterior hay varias recomendaciones de preparados para aplicar a las plantas. Pero resulta que esas mismas plantas son las que se usan en tratamientos para seres humanos. Es decir que los homeópatas no son ni siquiera capaces de diferenciar una persona de una planta.

Con respecto a sus fundamentos los agrohomeópatas (encabezados por el investigador mexicano Felipe de Jesús Ruiz Espinoza) no dan ninguna razón científica, sólo razones ideológicas. Por ejemplo en esta extensa nota sus argumentos parten de la "soberanía alimentaria", "efectos negativos de los transgénicos", "evitar la contaminación", etc. que podrán ser correctos o incorrectos en menor o mayor medida, pero que no sirven para justificar esta nueva disciplina.

De más está decir que la agrohomeopatía al igual que su disciplina mayor no tiene el menor sustento científico. Es solo agua.


Hay que tener cuidado: Que la ideología no se confunda con el conocimiento científico.


Actualización 6/5/2015

Publiqué este artículo en Twitter y tuvo cierta repercusión.



En otro tuit me llega el link a un "paper" que supuestamente sustenta la agrohomeopatía. También (aunque no dirigido a mí) comparte otro estudio.
Agradezco al usuario Fidel Romero (@fmrsrs) por emitir sus comentarios con respecto a este tipo de análisis. Los reproduzco íntegros:








Atentamente

"estos argentinos"

viernes, 1 de mayo de 2015

Ilusionismo y escepticismo


Suele afirmarse que el padre del ilusionismo moderno es el francés Eugene Robert-Houdin (1805-1871). Fue el creador de trucos como la suspensión etérea, el cajón de peso variable, trucos de clarividencia, el truco del árbol de naranja y otros que quedaron para la historia. Lejos de ser un simple mago que hacía su trabajo en ferias callejeras, él se dedicó a eso de forma profesional.

En 1856 fue contratado por el emperador Napoleón III para trabajar en Argelia. Su labor consistía en desacreditar las ilusiones de los morabitos, sacerdotes islámicos que inspiraban a los argelinos para combatir contra las autoridades francesas. Les subían la moral realizando trucos de magia que parecían imponentes. Robert-Houdin viajó a Argelia y realizó trucos que maravillaron a todas las tribus e incluso a varios jefes. De regreso a Francia fue recompensado por evitar la rebelión.

Más allá de que se pueda cuestionar esta actitud colonialista, lo cierto es que esto nos da la pauta de una relación que tuvo lugar desde los orígenes del ilusionismo moderno: La utilización del mismo para desacreditar lo supuestamente paranormal.


Imposible no hacer referencia al húngaro-estadounidense Erich Weiss, mejor conocido como Harry Houdini (1874-1926), quien tomó su seudónimo del apellido del mago antes nombrado. Todos recuerdan su carrera como escapista y sus impresionantes trucos. Pero hacia el final de su carrera se dedicó a desenmascarar falsos espiritistas. Luego de que uno lo estafara en un intento por contactarse con su madre asumió una posición combativa en contra de esta "ciencia oculta", desacreditando sus tretas y desafiándolos, sin que ninguno pudiera engañarlo.


Otro mago importante en la causa escéptica es el canadiense James Randi (seudónimo de Randall James Hamilton Zwinge). Además de ser un divulgador científico y de haber descubierto pseudociencias (como el famoso caso del experimento Benveniste) es un ex-ilusionista.
Creó la Fundación Educativa James Randi, dedicada a investigar los fenómenos considerados paranormales y comprobarlas en términos experimentales. Desde hace años viene ofreciendo un millón de dólares a todo aquel que demuestre tener poderes ocultos. Por supuesto que hasta ahora nadie lo ganó, ya que los conocimientos y habilidades de Randi puede anticiparse a todas las artimañas de estos estafadores. Es reconocido su enfrentamiento con el ilusionista israelí Uri Geller.


También hay que nombrar a Penn y Teller, un dúo de magos estadounidenses que se dedican también a la difusión del escepticismo y el ateísmo. Tienen un programa de televisión llamado Bullshit! en donde tratan estos temas y en donde le dedican episodios también a analizar los fenómenos y poderes paranormales. En este episodio se dedicaron a demostrar la falsedad de la ouija.


Para finalizar en el ámbito local se debe mencionar a Ladislao Enrique Márquez. En los '90 fue uno de los directores de el Centro Argentino para la Investigación y la Refutación de la Pseudociencia (CAIRPO) junto a los periodistas Alejandro Borgo y Alejandro Agostinelli. Por aquellos años se dedicó a utilizar sus conocimientos de mago para desenmascarar a estafadores profesionales como el Sai Baba, los cirujanos psíquicos filipinos o Richardo Schiaritti. En la actualidad escribe para el portal DiarioVeloz en una sección dedicada a desacreditar charlatanes..


A todos ellos y a muchos más nuestro agradecimiento. No hay nada mejor que saber que el entretenimiento también se use para promover el pensamiento crítico y escéptico.